NOCHES DE INVIERNO
A finales de agosto, estuve un par de días en casa de mi tío en Lekároz. Lekároz, es un pueblo chiquitito de Baztán, y sinceramente, el pueblo es muy escaso, no tiene gran cosa: un bar, una iglesía, y muchos caseríos. Éramos: mi abuela, mis dos hermanas (Leire y Ainhoa), mi tío, y yo. Mis hermanas compartían una habitación, mientras que yo tenía que dormir con mi abuela, por desgracía. Solemos ir allí desde que tenía tres añitos, por eso nos conocemos a todo el pueblo. También tenemos amigos, unos vecinos que conocimos cuando nos obligaron a salir mi tío y mi abuela; creo que hicieron muy bien en echarnos a la calle. Dio la casualidad de que cuando estabamos allí, fueran las fiestas del pueblo; yo creo que tuvimos muchísima suerte. En las fiestas habían: coches de carreras, juegos para niños, carreras con toros, colchonetas, y lo mejor de todo conciertos y mucha fiesta por la noche. Lo peor del viaje fue, que aunque fuera verano pareciera que estuviéramos en invierno por el frío y el mal tiempo que hacía. Por las lluvias y el mal tiempo tuvieron que quitar el concierto de "esne beltza", uno de mis grupos musicales favoritos. Aunque las cosas no iban del todo bien, se compensaron al quedar con los amigos, e ir de fiesta la última noche que me quedaba. Tengo muy buen recuerdo de la fiesta, porque me presentaron a muchísima gente, y ahí también entraban algún que otro loco, unos saladillos, gente borracha y hasta un tartamudo. Algo que me hizo mucha gracía, fue el loco; llevaba un trozo de madera cuadrada e iba diciendo que era su balón, lo raro era que se lo contaba a todos; al presentarse decía su nombre y después que ese era su balón. Esta es la foto, y él es el de la izquierda.
Total, que me lo pase muy bien, tuve una noche muy rara y fría, y sin duda alguna espero que os haya gustado mi viaje a Lekároz tanto como a mí.